El HMS Victory fue remolcado hasta Rosia Bay tras la victoria del almirante Nelson en Trafalgar. A pesar de los desmentidos por parte de la Marina Real (Royal Navy), la historia local cuenta que el cadáver de Nelson fue llevado a tierra en Rosia Bay, donde su cuerpo fue traspasado de un barril de brandy a uno de alcohol para su regreso a casa. En el mismo lugar hay una visita que merece mucho la pena, se trata del cañón de 100 toneladas conocido como 100 Ton Gun, instalado a principios del siglo XIX pero que nunca se disparó contra el enemigo.
Solo quedan dos cañones de este tipo en el mundo, el otro se encuentra en Malta. Nombrada así en honor al barón Napier de Magdala, esta batería se construyó entre 1878 y 1884 en respuesta a las recomendaciones de instalar en esa área una batería pesada de cañones RML (cañones rayados de avancarga). En 1883 se colocó uno de los dos cañones, situando el otro en la batería Victoria (Victoria Battery). Este pesado cañón se envió desde Inglaterra a bordo del SS Stanley y aterrizó el 10 de diciembre de 1882. Descargado en la batería del Muelle Nuevo (New Mole Battery), se necesitaron veintiún días para desplazarlo en un carro especial las escasas 400 yardas (unos 365 metros) que le separaban de su posición final.
Se colocó sobre su cureña el 23 de julio de 1883 y fue uno de los cuatro cañones enviados para reforzar Gibraltar y Malta contra el ataque de armas británicas similares que había adquirido la marina italiana. En 1898, durante unas pruebas de tiro, el arma se dañó, por lo que fue reemplazada por el cercano cañón de la batería Victoria, ya que se consideró que esta era una mejor posición. En el año 1906, el cañón ya se había quedado obsoleto. Actualmente sigue en la misma posición, aunque las piezas hidráulicas y el resto de mecanismos de la batería ya no están allí. Se dice que el cañón original se encuentra bajo el edificio de la cercana base de la fortaleza, enterrado en un gran pozo.